Padre Somarriba: "Los Judas han sumergido a los hermanos al despojo de su nacionalidad

En su homilía dominical, desde la iglesia católica Santa Agatha en Miami, el sacerdote nicaragüense Marcos Somarriba ofreció una reflexión sobre la figura de Judas Iscariote, estableciendo un paralelismo con aquellos que en la actualidad actúan con maldad y someten a naciones enteras a tal punto de hasta despojarlos de su nacionalidad, similar a lo ocurrido en Nicaragua.

El padre Somarriba retomó pasajes bíblicos para ilustrar cómo los actos de traición y ambición persisten a lo largo de la historia.

El religioso inició su mensaje recordando la traición de Judas: "Lo vende por simples monedas de plata, por centavos, lo traicionan, son motivos para causarle a Jesús la captura, la cárcel, la tortura, la crucifixión y la muerte al final. La escritura nos revela cómo actúa Judas y los Judas de hoy también. Los tiempos parecen que no han cambiado", comparó el sacerdote. 

El padre enfatizó que la traición de Judas ocurrió de noche, y agregó que la maldad se comete en la oscuridad, al igual que los planos siniestros de quienes actúan de forma encubierta. "Cuando Judas salió, dice la escritura, era la noche de la maldad. La maldad se comete a escondidas. Poca gente hace las cosas (maldades) a la luz del día. Siempre lo hacen en la oscuridad. En medio de la oscuridad y aunque se cometa ya claramente a la luz del día, es un acto de oscuridad que nace en el corazón vacío y de piedra que traiciona a cualquier precio y se vende al mejor postor", criticó Somarriba.

Añadió que la ambición se convierte en causa de sufrimiento. "Nuestros pueblos sumidos en la noche oscura, en la cual los Judas han sumergido a los hermanos en el dolor, el sufrimiento, el destierro, al despojo de su dignidad, de su nacionalidad y la miseria", señaló.  

Comparando a los traidores modernos, el padre Somarriba denunció a los "Judas de hoy " que, movidos por la ambición y la sed de poder, causan sufrimiento a pueblos enteros. 

"Es la noche de la ambición también, de quien hace y hará cualquier cosa por dinero o por poder. En el fondo, la noche es el momento en el que el enemigo urde los hilos de la venganza hacia nosotros, hacia pueblos enteros. Hay Judas que se preguntan, ¿qué más podemos hacer para controlar y destruir la dignidad de un pueblo?, ¿Con qué más podemos doblegar y subyugar a este pueblo que clama justicia y libertad?".

El sacerdote lamentó la falta de corazón y ética de estas personas que traicionan a los pueblos, comparándolos con asalariados que explotan y desangran a su propio pueblo. 

"Son gente que se olvidaron que dentro de ellos existe un corazón que Dios les dio. Son gente que no tienen corazón ni ética. Son arribistas y ladrones que saltan la cerca y no entran por la puerta de las ovejas. Son asalariados de sus intereses y su interés es el dinero y el poder que exprimen sacrificando y desangrando al rebaño y pueblo de Dios para beneficio, maleficio propio... ", señaló el Padre Marcos

Finalmente, el religioso hizo un llamado a la comunidad a vivir según el mandamiento del amor fraterno, como antídoto contra la maldad y la opresión. 

"El mandamiento nuevo es el único mandamiento. Si Dios falta, todo falta. Si no nos amamos unos a otros como él nos ha amado, estamos vacíos, estamos perdidos. ¿Por qué? Porque fuera de las etiquetas y las clasificaciones hay que tener una realidad presente, que todo hermano y hermana es sacramento de Cristo, quiere decir presencia de Cristo".
Concluyó enfatizando que solo el amor vence al odio, a la corrupción.