Ceshia Ubau emprende vuelo a Europa: lleva su raíz nicaragüense en el corazón y la música como equipaje

Cuando se apagó el eco del último aplauso, Ceshia Ubau se quedó sentada en silencio, mirando al vacío. A su alrededor, el teatro ya se había vaciado, pero el aire seguía vibrando con la emoción de su concierto de despedida.

“Mi primera sensación fue: ahora sí me voy”, recuerda con la voz suave, todavía entre nostalgia y asombro.

Durante meses, la cantautora nicaragüense había concentrado toda su energía en ese espectáculo que marcaría el final de una etapa y el comienzo de otra. No fue solo un concierto: fue un ritual de gratitud, un abrazo al país que la acogió durante años y el cierre de un ciclo creativo profundamente transformador.

“Después del concierto, abracé a todo el equipo. Fue un momento muy humano, muy de alma. Éramos muchas personas y todos dimos lo mejor de nosotros. Lloramos, nos reímos, nos aplaudimos. Luego me quedé sola en el escenario, sentada, viendo el vacío… Y ahí entendí que realmente me estaba yendo.”

El viaje hacia un nuevo ciclo

Desde 2018, Costa Rica fue su refugio, su laboratorio y su escenario. Allí encontró amigos, público, reconocimiento y una nueva forma de pertenecer. Pero también descubrió el límite de una etapa.
Por eso ahora, tras una década de sembrar arte y resistencia en Centroamérica, Ceshia Ubau parte hacia Europa.

“Quiero tener más oportunidades con mi carrera artística, poder acceder a otros escenarios y visibilizar la música y la cultura centroamericana en nuevos espacios”, explica.

“No me voy porque esté buscando escapar de algo, me voy porque siento que es momento de crecer. Esta etapa representa la posibilidad de seguir aprendiendo, de compartir mi música con otros públicos y de abrir caminos para otras voces centroamericanas. Llevar mi raíz a otros territorios.”

Entre raíces y vuelos

Nacida el 30 de octubre de 1997 en Managua, Ceshia estudió Psicología en la Universidad Centroamericana (UCA), pero su verdadera vocación siempre fue sanar a través del arte.

“Hogar es la capacidad de crear un espacio seguro para una misma, donde sea que esté. El escenario es uno de mis hogares. Costa Rica es otro. Y Nicaragua… Nicaragua sigue siendo mi raíz.”

Esa raíz está presente en cada acorde. Su canción Las mujeres de mi tierra la quiebra cada vez que la canta. Habla de su abuela, de la memoria, de las mujeres que sostienen el mundo sin ser vistas.

“Cuando la interpreté en mi concierto de despedida, lloraba mientras trataba de seguir. No podía evitarlo. Esa canción habla de mi abuela, y pensar que ahora estaré lejos de ella me parte el alma.”

La autenticidad como bandera

Su trayectoria en Costa Rica le valió reconocimientos como Canción del Año y Disco del Año en los Premios Música 503 de El Salvador, pero los premios no la desvían del propósito.

“Siempre le pido a Dios que me aterrice, que no permita que haga algo solo por encajar. El verdadero éxito está en la autenticidad.”

Ceshia no sigue tendencias: sigue pulsos del alma.
Su música —una fusión de World Music y pop latinoamericano— suena como un puente entre el dolor y la esperanza.

“Sanar cantando es poder verbalizar lo que duele y darte cuenta de que no estás sola. Que hay un público que siente lo mismo. Y eso es un alivio enorme.”

Entre los volcanes de Nicaragua

“Siempre han sido mi paisaje favorito: ir por la carretera y ver el Mombacho, el Masaya… esos volcanes son mi raíz, mi casa. Esa imagen la llevo en el pecho.”

Por eso, aunque sus pasos la lleven lejos, Ceshia no se despide: se transforma.

“Cuando una sale de su país, una parte de esa raíz sale también al mundo y puede florecer. Yo quiero florecer con mi raíz intacta, seguir siendo de donde soy, pero sin miedo de crecer.”

Con una guitarra, una voz que cura y una sensibilidad que trasciende fronteras, Ceshia Ubau se va —pero no se aleja.
Lleva a Nicaragua en el pecho, como canto, como oración y como promesa.

Reconocimientos

2025

• Premios ACAM (Costa Rica): Canción del Año, Mejor Canción Urbana, Álbum Pop del Año y Mejor Ingeniería de Sonido por Mujer Salvaje y EDÉN.

• Premios Música 503 (El Salvador): Canción del Año, Álbum Centroamericano del Año, Cantautora del Año y Mejor Balada Pop.

• Premios Estela (Guatemala): Mejor Interpretación Femenina por Mujer Salvaje.

2024

• Reconocimiento de People in Need por su aporte a los derechos humanos a través de la música.

2023

• Premios ACAM (Costa Rica): Productores del Año (Rigoberto Alvarado y Brandon Cores) por el disco LUZ.

2021

• International Songwriting Competition: tercer lugar mundial en composición por la obra Mayahuabá.